10. Antes de que amanezca

10. Antes de que amanezca


Miller, se encontraba en casa de Kurtain muy temprano en la mañana, era necesario que él aceptara lo propuesto por Jeremy,  no podía fallar, cuando llegó a casa de Kurtain, no había salido aún el sol. Siempre que quería algo se le olvida de que pasara el tiempo necesario para poderlo hacer; así que se estacionó su auto y se dispuso a esperar que Stephen se levantará, de súbito escuchó un ruido proveniente del otro lado del pórtico que daba al garaje. Era Kurtain que estaba sentado en el banco con la mirada ida al infinito,  Miller se bajo y se sentó al lado de él.
-¡Que madrugador!- Saludó Kurtain, sin mucho ánimo.
- Se que estás en una posición difícil- comenzó hablando Miller- pero recuerda que algunas veces tenemos que evaluar lo que está bueno y lo que está malo, allí principalmente radica el darle sentido a la vida. Sí, se que Hudson ha sido tu amigo por mucho tiempo; créeme, no puedes dejar que eso se interponga en “tu razón de vivir  y el destino que tomaste”.

-No creo que puedas entenderme Scott, no sabes como me siento ahora, me he parado muy temprano a pensar eso mismo y si te pudiera contar, tal vez no me dirías eso y te darías cuenta de que no siempre hago las cosas bien, sino que por el contrario me siento como un ruin, permití que las cosas siguieran, aún sabiendo que como dijiste, coloco el mal sobre bien.
-Quiere decir que ¿Tú también estás metido en todo esto con Susan y Moore?- Miller preguntó, sobresaltado por la confesión de Kurtain y se paró de la silla donde Kurtain se encontraba, mirando al infinito.- ¡Explícate bien, porque no te entiendo!
-Ojala fuera así de fácil, iría a la cárcel y ahí acabaría todo, pero no, es un poco más complicado que eso-. Kurtain se lo quedó mirando, tenía que desahogarse con alguien pero no sabía si Miller podría ser esa persona. Scott Miller lo detuvo con un suspiro de alivio y se volvió a sentar, se esperaba lo peor, siempre considero a Hudson un dominador de Kurtain y era por eso que ahora él se enfrentaba a esta decisión. 
-Ah, ah, lo otro… Cuando Miller trató de detener las palabras ya nada se podía hacer, Kurtain no podía creer lo que escuchaba, ahora el sorprendido era él. Miller se sentó y se quedó callado por un rato al igual que Kurtain, la brisa soplaba y el amanecer estaba aclarando toda la zona. Nadie se atrevía a hablar, cualquier cosa que se dijesen estaba de más.
- ¿Desde cuándo lo sabes?-preguntó Kurtain-¿Alguien más lo sabe?
-Me entere por casualidad, cuando los seguí a los dos  hasta el camino,  la noche que Hudson te vino a buscar, aunque no era mi intención, pero bueno las cosas se dieron así, no te preocupes solo lo sé yo, y ni trates de explicármelo, porque no entiendo como un muchacho tan exitosos con las mujeres, porque te he visto, tenga tan mal gusto con un hombre.
- ¡No te pones serio ni ahora!, no te lo voy a explicar, no te preocupes, ni yo lo entiendo, y mira si le pensado en ello, bueno… como tú dices; paso. Lo que te pido es que no comentes nada, dentro de muy poco me caso y todo habrá acabado para mí, como comprenderás ahora lo tengo claro, no puedo hacer lo que me pide “el manda  más”, así que búsquense otro. Yo renunciaré, no puedo seguir allí, tarde o temprano las cosas empeoraran.
-Me alegra que hayas acabado con esa confusión, pero no que renuncies a tu trabajo, no te puedo decir que a todos nos pasa-lo dijo soltando una risa- se que eres una persona de muy buen juicio, y aunque suene feo decirlo, fuiste manipulado por Hudson, te hace sentir que eres responsable de las dicciones que hasta ahora hace y no creo que le guardes tanto respeto a quien solo juega con las personas, porque él en tu caso seguramente no hubiese hecho lo que tú haces, te hubiese delatado sin que le temblara el pulso, así que piénsalo bien, yo trataré de darle una excusa a Jeremy. -Se levantó y lo dejó sumido en sus pensamientos.

Las cosas no tomaron el rumbo que Miller hubiese esperado, ahora no solo tenía que desenmascarar a Hudson, también habría que proteger a Kurtain pero ¿Cómo podría ayudarlo? Si no entendía como pudo suceder, en el trabajo nadie ni siquiera le hizo referencia a algo que para él era más que evidente, algo se traían esos dos, Alessa regresaba hoy de arreglar algunos pendientes con respecto a la boda, eso arreglaría las cosas, no sabía como se manejaban estas asuntos pero de algo estaba seguro “Kurtain tenía que alejarse de Hudson”, quizás las cosas se mejoren, ya investigaría sobre estos casos. Porque él no entendía la bisexualidad, pensaba que era un mito y nada más.

Comió algo por el camino y esperó la hora que abriera la oficina, se le hizo tarde, pero cuando llegó, fue directamente a conversar con Capitán Jeremy que en ese momento se encontraba reunido con Bill, los saludó y dijo:
-Tengo que hablar con usted respecto a no poner al agente Kurtain en la situación de decidir.
- Creo que llegaste tarde, ya Kurtain aceptó hacer lo que planeamos. -Miller se sentó y se quedo pensativo, estaba contento por la decisión tomada por Kurtain, pero no podía dejar de pensar en  todo lo que él debía estar pasando, esperaría de inmediato el contraataque de Hudson.

El no haber podido terminar el ciclo con Hudson volvía loco a Kurtain, quería que todo esto terminara, su corazón se desangraba sin remedio, si hubiese sabido que ese encuentro después de la carreras iba hacer el ultimo lo hubiese abrazado para no separarse jamás, ahora se casaría dentro de tres semanas y seria él final de todo, en su cabeza quedaría por siempre la sonrisa de Hudson, no podría seguir trabajando allí y verlo todos los días seguramente sufriría mucho. En la mano sujetaba unas fotografías que se tomaron juntos, mientras estaba sentado en la oficina tratando de poner su cabeza en orden.